Los roedores del bosque tropical arriesgan sus vidas para alimentarse

19 de Diciembre de 2013 3:49pm
periodista
Los roedores del bosque tropical arriesgan sus vidas para alimentarse

Según recientes resultados de un estudio en el Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales en Panamá los roedores hambrientos que se despiertan temprano son mucho más propensos a que se los coman que aquellos que consiguen mucha comida y descansan. El estudio fue publicado en la revista Animal Behavior, edición temprana en línea, diciembre de 2013.

Los científicos equiparon a agutíes (Dasyprocta), roedores comunes de la selva y a ocelotes, sus depredadores felinos, con collares de radio y los rastrearon 24/7 a través de un sistema de telemetría automatizada en Isla Barro Colorado. Los agutíes eran más activos durante el día. Los ocelotes son más activos durante la noche.

"Los agutíes comen semillas de árboles. Los ocelotes comen agutíes“, comentó Patrick Jansen, investigador asociado en el Smithsonian en Panamá y profesor asistente en la Universidad de Wageningen. "Cuando los alimentos son difíciles de encontrar, los agutíes pasan más tiempo forrajeando y tienen más probabilidades de que un ocelote se los coma."

Para determinar el momento en que era peligroso para los agutíes estar activos, los científicos primero registraron los patrones de actividad diaria de éstos, así como de los ocelotes. Cámaras trampa colocadas por toda la isla fotografiaron todos los animales que pasaban delante de la lente y registraron el tiempo.

Durante el día, miles de agutíes eran activos, pero pocos ocelotes rondaban la isla. Cerca del atardecer, a medida que los agutíes buscaban el refugio de sus madrigueras, la proporción de ocelotes a agutíes despuntó y luego descendió de nuevo alrededor de la salida del sol.

Las señales de radio producidas por el collar transmisor de un animal fueron recogidas simultáneamente por las torres de radio alrededor de la isla. Los investigadores pueden "ver" la actividad de los animales en línea.

Cuando un animal dejó de moverse, los científicos vieron en sus pantallas una línea plana, al igual que el electrocardiograma de una víctima de ataque al corazón. Cuando los agutíes murieron, los investigadores fueron rápidamente al lugar para determinar la causa de la muerte. La colocación de una cámara de video en el lugar les permitió conocer si un depredador volvía para comer los restos.

Diecisiete de 19 agutíes muertos encontrados en el estudio fueron matados por ocelotes. La mayoría de las muertes ocurrieron justo antes del amanecer y justo después de la puesta del sol, cuando relativamente pocos agutíes están activos.

Los científicos compararon los patrones de actividad diaria de los agutíes entre las partes del bosque que contrastan con la abundancia de semillas de palma. En primer lugar, se determinó en qué momento los agutíes entraban y salían de sus madrigueras en base a los cambios en las señales de radio. En segundo lugar, colocaron cámaras trampa en las entradas y registraron el tiempo en que un agutí entró y salió.

Ambos métodos mostraron que los agutíes en zonas con menos comida dejaron sus madrigueras antes y entraron en sus madrigueras más tarde que los agutíes en zonas ricas en alimentos. Los agutíes hambrientos fueron mucho más activos al anochecer y tenían más probabilidades de que ocelote los cazara.

"Sabíamos que los animales hambrientos tienden a tomar más riesgos", comentó Jansen. "Pero este es el primer estudio que documentara a fondo el comportamiento de ambos depredadores y presas."

A continuación, Jansen examinará qué significan las diferencias en el riesgo de depredación para la dispersión de semillas por los agutíes, que entierran las semillas como reservas de alimentos en numerosos escondites dispersos. "Una vez que un ocelote mata a un agutí, éste ya no puede comer sus reservas de alimentos", comentó Jansen. " Estas semillas pueden germinar y establecer un nuevo árbol. Los agutíes hambrientos plantan árboles, pero puede que nunca lleguen a ver el fruto de su trabajo, un fascinante circulo de retroalimentación".

Este estudio fue apoyado por la Fundación Nacional de Ciencias de EE.UU. y la Organización Holandesa para la Investigación Científica. El Sistema Automatizado de telemetría fue financiado por la Fundación de la Familia Frank Levinson.

El Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales, con sede en la Ciudad de Panamá, Panamá, es una unidad de la Institución Smithsonian. El Instituto promueve la comprensión de la naturaleza tropical y su importancia para el bienestar humano, capacita a los estudiantes para realizar investigaciones en los trópicos y promueve la conservación mediante el aumento de la conciencia pública sobre la belleza e importancia de los ecosistemas tropicales. Sitio web: www.stri.si.edu

Back to top