Vinos para un San Valentín menos empalagoso
Para lidiar con corazones (en cientos, repletos de brillo), flechazos y romanticismos que son como tomar un litro de miel sin anestesia, proponemos un Día de los Enamorados “más fresco y canalla”. Recurrimos a la sensibilidad y el desenfado del querido Guillermo Cruz (sumiller de Mugaritz) para lograr esta lista en la que podemos tomarlos juntos o no, en un juego perfecto de “armonía no amorosa”.
1. FOLLADOR
Arrancamos con un prosecco italiano, de uva glera, muy fresco, de la Azienda Vinícola Follador. Es una buena opción para el aperitivo, porque ayuda a abrir boca y las burbujas activan las papilas y nos predisponen a comer. "Este vino no busca perfección ni complejidad, solo quiere ser arriesgado y fácil, porque la vida es fácil y muchas veces tendemos a complicada".
2. FAI UN SOL DE CARALLO
Elaborado con una mezcla de variedades autóctonas gallegas, sobre todo treixadura, es característico por ser atlántico, seco e impecable, de la zona de Ribeiro, elaborado por Bodegas El Paraguas. Buen acompañante de ostras, almejas, berberechos y todos los mariscos locales.
3. QUÉ BONITO CACAREABA
De Galicia viajamos a Rioja, a la bodega Benjamín Romeo, con este blanco más estructurado y potente. Mezcla de garnacha blanca, viura y malvasía, podemos apuntarlo como la bebida perfecta para primeros como risottos, arroces con setas o carabineros. Incluso, con pescados como la lubina.
4. LA REINA DE LOS DESEOS
Este vino de Madrid, resultado de una colaboración entre la bodega Comando G y Vilaviniteca, es un homenaje a las impecables garnachas de la zona. Con él podemos pensar en pescados potentes (como los de roca), carnes blancas o aves. Aquí la clave es "o muy contundente viniendo del mar o más sutil si es de la tierra".
5. GALLINAS Y FOCAS
De los mallorquines 4 kilos vinícola, esta mezcla de manto negro y syrah tiene estructura y una historia preciosa detrás de su nombre. Gallinas y focas fue el escogido por algunas personas con discapacidad de la Amadip Esment Fundaciò quienes decidieron que "las gallinas eran divertidas y las focas aplaudían". Perfecto con carnes y cerdo negro mallorquín.
6. DE PUTA MADRE
"¡Hostia, este vino es de puta madre!", exclamaron, literalmente, los bodegueros de Hermanos Lutor… y así se quedó. Este verdejo de la D.O. Rueda, de vendimia tardía, es semidulce y fresco. Además de ser buena pareja de ensaladas de frutas y postres ácidos es, dice Guillermo, "de puta madre para terminar la cena de San Valentín".
Fuente: http://gastroexperience.com.es/