Seguridad social, pensiones y salud

La Caja de Seguro Social (CSS), que está llamada a garantizar cobertura de salud, medios económicos de subsistencia y protección a poblaciones más vulnerables, se precipita a una agónica situación, mientras el número de cotizantes y dependientes se incrementa vertiginosamente, superando los 3 millones de personas posiblemente.

La falta de estudios actuariales posteriores al 2011, además de mostrar un panorama incierto sobre la realidad financiera de la entidad, la cual podría ser más crítica de lo que esperamos, representa un incumplimiento con lo que ordena su Ley Orgánica.

Entretanto se actualizan estos informes, y antes de especular sobre modificaciones en las tasas de aportes, número cuotas y otras variables para su rescate, insistimos en la ejecución de acciones inmediatas que cumplan los objetivos propuestos y preparen el escenario para iniciativas contundentes y a largo plazo.

Adicionalmente, para lograr mayor eficiencia en las funciones y procesos que ejecutan la entidad, insistimos en la separación de los programas de salud de los de pensiones, de manera que estos sean administrados por dos instituciones diferentes con juntas directivas independientes y personal especializado, por un lado, en aspectos médicos y de salud, y por otro, en materia financiera.

Modernizar los procesos logísticos, cobros, compra y contratación de insumos, suministros, equipos y medicamentos, así como el desarrollo de una estrategia de recursos humanos, orientada a motivar al equipo actual, a la vez que se impulsa la generación de mayores profesionales y técnicos de la salud.

Aguardamos el llamado al diálogo nacional por el rescate de la seguridad social, acordado a iniciar posterior a la inauguración del Canal ampliado. El modelo actual requiere de una transformación integral, compuesta de acciones concretas, firmes y a largo plazo, que consideren el bienestar general por encima de cualquier costo político.



Jorge García Icaza

Presidente